Da gusto disfrutar de unos días de descanso y de poder dedicarla más tiempo a mi pequeña y tengo que decir que estos cuatro días aunque el Sábado por la mañana se trabajaba, han dado mucho de si y hemos disfrutado mucho de algo de tiempo cosa que normalmente no podemos hacer, ya que el trabajo nos deja mucho menos tiempo del que nos gustaría.
Hacia tan bueno que hasta Paula estreno bañador.
Disfrutamos de un par de días en el campo, de la barbacoa, de la comida en familia y de primito, los peques se lo pasaron fabulosamente bien, jugaron hasta la saciedad y disfrutaron de la naturaleza.
Es tan maravillosos verlos juntos y disfrutando que el resto de las cosas pasan a un segundo
lugar, Paula es un tormento no para ni un segundo, se sienta se pone de pies agarrada a la silla, al palo de la sombrilla, al triciclo de su primo a donde pilla no tiene parada, aunque la hierba pinchando en sus rodillas no la gusta nada y no sale mucho de exploración por el jardín, era curioso verla gatear sin que sus rodillas tocaran la hierba para llegar donde quería, pero tengo que decir que intentaba mantenerse entre las 3 o 4 toallas que la colocamos, o en los limites de estas.
Ella y primito aun se están conociendo y aprendiendo a jugar juntos pero estoy segura que pronto serán largas tardes las que pasen jugando y disfrutaran mucho, de momento Primita le quita los juguetes, le empuja y le da manotazos así que primito no la tiene en mucha estima, como es normal, pero bueno aun no saben lo que hacen están aprendiendo.

Y el Domingo día de descanso disfrutamos de nuestra casa, salimos a comer Dos y Pingada plato típico de Zamora el domingo de resurreccion salimos a pasear y disfrutamos del ambientazo que había en las calles estaba a rebosar de gente, las calles respiraban tanta vida, que daba gusto pasear.

Y como una imagen vale mas que mil palabras aquí quedan unas fotos de esta semana santa y de cuanto a disfrutado la pequeñaja.
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